TEMA 5: ROMPIENDO LAS BARRERAS

5.1 Los bloqueos creativos: cognoscitivos, emotivos y culturales.

Cuando empecé a escribir en este blog, ya realicé una entrada en la que hablé lo que eran los bloqueos. Los bloqueos son situaciones en las que, por varios factores, no conseguimos crear nada creativo. Como ya dije, esos momentos nos llevan a una situación de “agobio mental”, lo cual nos dificulta aún más las cosas.

Los bloqueos los podemos clasificar en 3 grandes grupos: los bloqueos cognoscitivos, emotivos y culturales.

•  BLOQUEOS COGNOSCITIVOS. Son los bloqueos que afectan a nuestra mente. Nos dificultan el camino para encontrar soluciones a los problemas, darle otras perspectivas a las ideas, llegando a producir un estancamiento en la mente. Un ejemplo puede ser cuando no nos damos cuenta de lo obvio porque nos centramos en ideas muy complejas y no nos damos cuenta de las ideas más obvias.
• BLOQUEOS EMOTIVOS. Son aquellos bloqueos que se encuentran dentro de nosotros mismos. Son los temores o las emociones que nos impiden obtener ideas creativas. Existen varios tipos de bloqueos creativos. Algunos de ellos son, por ejemplo, el miedo a equivocarse, la necesidad de encontrar soluciones rápidamente o la falta de motivación, entre otros. Todos estos bloqueos se pueden evitar a través de determinados métodos. También hay que tener en cuenta la actitud que tenga cada persona frente a los problemas.
• BLOQUEOS CULTURALES.  Son aquellos valores y normas que se transmiten de generación entre generación. Estos valores los interiorizamos cada uno de nosotros, regulando nuestro comportamiento durante prácticamente toda nuestra vida. Por lo tanto, los bloqueos culturales proceden de la educación y la creatividad suele romper las normas y valores, aportando cambios. Este tipo de bloqueos se pueden dan, por ejemplo, porque nos veamos obligados a seguir normas establecidas, porque tengamos en cuenta los prejuicios sociales, etc.

5.2 El miedo a la libertad

Cualquier persona se ha visto envuelto en una situación de cohibición para la expresión de sus ideas, teniendo miedo a expresar lo que piensa. Este es el miedo a la libertad.

La obra de Erich Fromm, “El miedo a la libertad”, nos hace un repaso sobre cuál es el verdadero significado de la libertad para el hombre moderno y cuáles son los factores que impiden su desarrollo. La principal postura que defiende en esta tesis es que el hombre moderno no ha podido lograr la libertad.

El hombre, cuanto más se convierte en individuo, tiende a unirse al mundo a través de las condiciones que le impone la sociedad para buscar alguna forma de “seguridad”. Es aquí donde juegan un papel importante los mecanismos de evasión que, según Fromm, son:

• El autoritarismo: mecanismo de evasión de la libertad que consiste en la tendencia a abandonar la independencia de uno mismo para unirse a alguien o algo exterior para adquirir como “fuerza”. Es como si buscara algo fuera de él para tener motivación.
• La destructividad: es un mecanismo de evasión contra el aislamiento porque aplaca la soledad al compararse el sujeto con el mundo que le rodea.
• La conformidad automática: es por ejemplo cuando una persona deja de ser él mismo para desempeñar una personalidad que la sociedad le impone.

El tema de libertad de cada persona ha ido evolucionando con el paso del tiempo. Por ejemplo, en la edad media predominaba una ausencia de libertad individual, en el renacimiento surgió la competencia entre los miembros de la sociedad. Hay ciertas personalidades que han participado en el nacimiento de la libertad del hombre como puede ser Lutero que le dio independencia al hombre en cuestión religiosa diciendo que la relación con Dios era directa; Calvino también afirma que la religión está arraigada a la impotencia del ser humano. En la sociedad moderna, el hombre es más independiente y más crítico con una mayor confianza en sí mismo con una sensación de aislamiento. En la sociedad contemporánea, los medios de comunicación ejercen una gran influencia sobre los individuos y el hombre se siente aislado y solo en el ámbito social, que es donde aparecen los mecanismos de evasión.

Para Calvino, Lutero, Kant y Freud el egoísmo es el amor a uno mismo, pero para Fromm, el egoísmo no es idéntico al amor a sí mismo, sino a su opuesto (el egoísta no quiere ni a los otros ni a él mismo).

El hombre siempre va a intentar escapar de ese miedo a la libertad a través de los mecanismos de evasión. Una vez que el ser humano haya superado el temor a sí mismo,  entonces ya podrá ser libre realmente.

5.3 Los contextos de la actividad creadora.

Se han realizado numerosos estudios para saber en qué situaciones se desarrolla la creatividad y qué rezones le llevan a ello. Algunos de los factores que pueden influir son la edad, el sexo, la raza, la situación geográfica, etc. Pero la verdad es que tampoco se pueden considerar estos factores como los decisivos para decir si una persona es creativa o no.

Personalmente, creo que una persona es creativa si ha nacido con ello. Me refiero a que tenga unas características que le hagan serlo; hay personas que tienen muchísima más motivación e imaginación que otras, y creo que eso es un punto a favor de cada persona.

Hay 4 niveles que definen el contexto creativo:

• Contexto subpersonal: es el que se refiere a nuestra mente. Interactúa el hemisferio derecho (el creativo) donde surgen una serie de ideas.
• Contexto impersonal: su estudio está limitado a profesionales de la disciplina a la que se dirige la actividad creadora.
• Contexto personal: reconocimiento psicológico para la compresión de los procesos y de las emociones.
• Contexto multipersonal: surge cuando el proceso creativo es compartido por muchas personas.

En mi opinión, diría que la actividad creadora no tiene un contexto concreto donde poder desarrollarse. Es algo que posee cada persona, que desarrollamos más durante nuestra infancia y que se desempeña mejor en unos ámbitos que en otros. 

Fuentes:

http://es.wikipedia.org/wiki/Creatividad

http://blog.micelulacreativa.com/archives/627

Apuntes de clase